lunes, 22 de diciembre de 2014

Orriols también es València



Orriols es un pieza fundamental del entramado de calles, plazas y sobre todo personas que es València, es imposible entender la ciudad sin tener en cuenta este barrio situado al norte, en el distrito de Rascanya. Desde que a finales del siglo XIX dejó de ser un pueblo y se anexionó a València, su historia y su futuro han ido evolucionando a pesar del olvido al que Rita Barberá lo ha condenado durante los últimos 20 años.

De los barrios que conforman nuestra ciudad, Orriols me gusta especialmente, por eso he querido empezar a encajar las piezas del puzzle por aquí, y me gusta porque la voluntad de la gente por convivir y el trabajo de integración que se ha hecho desde las asociaciones, es inversamente proporcional a la desidia a la que les ha sometido el gobierno del Partido Popular


Orriols es el barrio de Valencia con mayor población extranjera. Eso, lejos de convertirlo en un enclave conflictivo, ha hecho de él un ejemplo de multiculturalidad e integración, gracias a iniciativas como el proyecto Orriols Con-Vive, puesto en marcha en enero de 2014 e integrado por las personas y asociaciones del barrio que, desde hace años, realizan una labor importante de organización vecinal y ayuda a las personas con menos recursos. Pero Orriols Con-Vive necesita financiación para poder ejecutar proyectos y mantener el local que ha jugado el papel del centro cívico, cultura y vecinal que nunca ha tenido el barrio. Rita Barberá debe pensar que si aprietas la gente se ahoga y se olvida de que ellos también son València y merecen el mismo trato que el resto de barrios. Afortunadamente la alcaldesa se equivoca, Orriols sigue siendo un barrio lleno de vida, de iniciativas y de sueños, donde las personas han aprendido a organizarse y a decidir como quieren vivir. Sin embargo por muy admirable que sea, por mucho que me guste pasear por el barrio y comprar a peso las legumbres y las especias y encontrar la esencia de siempre en cada rincón, no es justo, los vecinos de Orriols no se merecen el olvido, ni la desidia, ni el poco interés que Rita y Barberá y sus secuaces han mostrado por el barrio.

Por eso exigimos y proponemos más inversiones en Orriols, que el estado de edificios emblemáticos como la Alquería de Albors o la ermita, vayan en la misma dirección que el trabajo y la ilusión de sus vecinos, queremos un centro cívico cultural y vecinal donde las personas que hasta ahora han coordinado los proyectos dentro del barrio puedan trabajar y queremos, en definitiva, que los vecinos de Orriols tengan premio, por la lección de convivencia que llevan años dando.

1 comentario:

  1. Un recorregut preciós pel barri de la mà de la reivindicació i els reconeixement de l'esforç de les persones que hi viuen.

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